NO LO DUDES, TIENES PERMISO DE ADMINISTRADOR.

Hablemos hoy del proceso que a todos nos tiene amargados: el proceso del sufrimiento.

Llamaremos sufrimiento a ese estado emocional negativo que se sostiene en el tiempo. El origen puede ser diverso: la pérdida de una persona, una meta no alcanzada, una decepción, una enfermedad etc.

Perder a alguien, no alcanzar una meta, no sentirse querido o sentirse abandonado duele y mucho. El contexto no determina pero sí que condiciona y los acontecimientos dolorosos se quedan almacenados en el cerebro para siempre. No hay reset.

Tenemos una base de datos de dolor y otra de alegrías con muchos backups de seguridad por lo que va a ser muy difícil borrarla.

La habilidad reside en el programa con el que accedemos a esta base de datos. La aplicación que utiliza nuestro cerebro para leer la base de datos del dolor la podemos cambiar. Hay que modificar el cerebro físicamente pero estamos preparados para ello.

Accedamos siempre el dolor con los programas: "noexageromidesgracia.exe", "quéaprendodetodoesto.exe", "meríodemidesgracia.exe", "elmontondecosasquevalenlapena.exe", "yalopensarémañana.exe", "cuantabellezamerrodea.exe", "yacansoalosdemásconmishistorias.exe"

Estos programas son de software libre, no cuestan nada y los podemos instalar y usar cuando queramos.

Podemos "Terminar el proceso" desde nuestro "Gestor de Tareas" y arrancar otros procesos que necesitan mucha CPU dejando poca para los programas del sufrimiento.

Todos conocemos estros procesos: "reír.exe", "bailar.exe", "hacerelloco.exe", "besar.exe", "abrazar.exe", "pintar.exe", "trabajarconpasión.exe", "conocergentenueva.exe", "muchosexo.exe", "respirar.exe", "darseunmasaje.exe", "admirarlanaturaleza.exe"

Los programas del sufrimiento poco a poco se van quedando desactualizados y empiezan a ser incompatibles con el nuevo sistema operativo que vamos creando poco a poco en nuestra mente a partir de los programas del vivir de manera positiva.

Nuestro cerebro es el único ordenador que cambia su sistema operativo de manera dinámica a partir de los programas que se ejecutan.

Recordad, el dolor es la base de datos y el sufrimiento es el programa que recupera el dolor de la base de datos. No le des mucho espacio en tu CPU

TALLER ACTIVO: GENERANDO RELACIONES SINÉRGICAS

Después de 6 meses de existencia pasamos de la teoría a la práctica.

Generando relaciones sinérgicas es el título de un taller cuyo objetivo es aprender a desconectar para mejorar la conexión con los demás.

Reestructuración cognitiva, relajación, inoculación del estrés, atención plena, estimulación de los sentidos, comunicación kinestésica, distancia social, comunicación asertiva, pro actividad, búsqueda del ser auténtico, dinámica rectora de equipos...

No es un taller alternativo ni clasificable. Es un taller para vivirlo y sacar cada uno su propio aprendizaje.

Ningún colectivo humano puede prosperar sin unos valores pero los valores no pueden imponerse. Los valores deben surgir del propio individuo como una necesidad y no como una obligación. Sólo desde la higiene emocional y desde el coraje pueden construirse sociedades efectivas y solidarias. Los estados emocionales positivos son el caldo de cultivo de comportamientos éticos.

El futuro está en la educación emocional. Sólo personas en equilibrio consigo mismas pueden ser elementos de una sociedad equilibrada.

Si conseguimos vencer el miedo a comunicarnos habremos destruido muchas barreras.

DESCRIPCION DEL TALLER:

Objetivos del taller:

Abrir un espacio de comunicación en una sociedad que necesita ante todo higiene emocional para vivir unos valores sentidos y no impuestos.

Contenidos del taller:

- Vencer nuestra vulnerabilidad con coraje para conectar con los demás.
- Generar relaciones ínter dependientes.
- Pro actividad: el contexto nos condiciona, no nos determina.
- Higiene emocional para actuar con principios y valores.
- Herramientas para moldear nuestro cerebro.
- Los sentidos, nuestra fuente de aprendizaje

El taller durará 3 horas

Organiza:

Espacios Eutópicos

Imparte:

Enrique Valenzuela Castilla

Profesional liberal, Ingeniero Industrial con formación en psicosociología de la empresa.

Consultor organizacional.
Coach ejecutivo.
Desarrollador de equipos de trabajo.
Outdoor trainer.
Formador y profesor en habilidades personales.

Metodología:

Taller experiencial. Aprender de lo vivido.

Precio:

GRATUITO.

Inscripción:

Para inscribirse debe enviarse un correo electrónico a espacioseutopicos@gmail.com indicando:

- Nombre y apellidos
- Un teléfono móvil para poder avisar inmediatamente en caso de cualquier contingencia.

Las plazas son limitadas por lo que se usará como criterio de selección para el taller el orden de inscripción de los correos electrónicos recibidos.

Requisitos:

- Ropa cómoda.
- Esterilla para tumbarse en el suelo.
- Calcetines por si hay que descalzarse en alguna dinámica
- Mucho entusiasmo

Una vez un persona me preguntó:

¿Qué cualidad valoras más en las personas que trabajan contigo?

Le contesté AFABILIDAD y le enseñé los sinónimos que dice el diccionario de esta palabra:

Cordial, amable, cortés, afectuoso, cariñoso, simpático, acogedor, tierno, dulce, sencillo, llano, franco, abordable, bondadoso, apacible, gracioso, ameno, gentil, amistoso, afectivo, cálido, benévolo, benigno, condescendiente, sociable, familiar, humano, expresivo, efusivo, jovial, campechano, urbano, atento, obsequioso.


Una vez mostrado el diccionario le pregunté yo:

¿Con quién quieres compartir 8 horas al día?

Era escurridizo y esquivo.
Era un poco sordo.
Era intuitivo.
Era enamoradizo.
Era valiente.
Era paciente ante las circunstancias.
Era esquivo a los dogmas.
Era adicto a las sensaciones.
Era proclive a tener nuevas experiencias.
Era consecuente con el dolor y lo llamaba aprendizaje.
Era descubridor de sentimientos vitales.
Era una alquimista que transformaba estos sentimientos en valores.
Era único y era parte de un todo.
Era un ferviente seguidor de la vida y del amor

¿Quién era?

Búscalo, quizá eres tú y aún no lo has encontrado.

LO SIENTO CUMPLO MI TRABAJO

Parecía que la terapia de choque era perfecta. El plan para la semana iba a permitir equilibrar el cuerpo y alma del paciente.

Ejercicio físico combinado con sesiones de relajación. Meditación Zen combinada con ejercicios de atención plena. Paseos por la naturaleza y descubrimiento de nuevos parajes. Los niveles de endorfinas, cortisol, serotonina y otras hormonas y neurotransmisosres parecían que estaban alcanzando sus niveles óptimos.

No hay nada como estimular los sentidos, apreciar la belleza de la naturaleza, tomar consciencia de uno mismos y del tiempo presente para entrar en un estado de bienestar.

Pero.... de repente un extraño en nuestra cabeza.

¡Vuelvo a sentir malestar! ¡Vuelvo a sentir dolor! ¡Vuelvo a sentir amargura!

A las terapias de anteriores hay que sumar siempre una terapia de coraje. ¡Hay que hablar con uno mismo! Hay que hablar con ese "señor" que habita en nuestra cabeza responsable de abrir la esclusa de nuestras emociones negativas.

El primer principio de la comunicación es intentar entender primero a la otra persona. Por esta razón hay que entender que este "señor" que habita nuestra cabeza simplemente "cumple su trabajo".

Este señor abre la puerta de la frustración para que nos enteremos que debemos superarnos, que debemos luchar porque en la apatía y la indolencia no nos hacen crecer y aprender.

Este señor abre la puerta de los recuerdos de las personas perdidas para que nos aferremos a la vida. Para que aprendamos lo que realmente importa.

Este señor abre la puerta de la culpa para que maduremos y sepamos separar la culpa irracional provocada por nuestra "mala" educación de la incoherencia de no actuar como realmente sentimos.

Este señor abre la puerta del desamor para que seamos sinceros con nosotros mismos y sepamos separar el interés que tenemos en las personas del amor que procesamos por ellas.

Este señor nos hace aprender sin decirnos lo que debemos estudiar. El aprendizaje está en la experiencia y él nos la provoca.

Podemos hablar con él y reírnos de los mensajes que nos envía. A veces son mensajes obsesivos copiados de una película edulcorada. Ridiculizar el mensaje puede provocar que éste no nos vuelva a llegar.

Hay mucha irracionalidad que podemos eliminar y sentimientos auténticos que se fijan de manera permanente.

Hay que aceptar que hay que aceptar. Esto significa que las emociones negativas forman parte también de la vida y que si las llamamos negativas serán aún más negativas. Yo las voy a empezar a llamar ahora emociones del aprendizaje. Está bien esto de que el lenguaje condicione nuestros pensamientos ...

Eso sí, no dejemos de seguir generando emociones positivas. Son la adormidera de las emociones de "aprendizaje".

BUENO PERO NO TANTO

¿Existen personas buenas de verdad?

Quizá lo primero que habría que aclarar es el significado de ser bueno. Sin entrar en grandes reflexiones éticas o teológicas una persona buena es aquella que ama a los demás, que sirve a los demás y se sacrifica por ellos.

Visto desde fuera, parece fácil catalogar a las personas que nos rodean observando simplemente su conducta.

¿Qué mueve a las personas a ser "buenas"?

Algunas motivaciones son:

• Esperar la acción recíproca.
• Mostrar una imagen de mí socialmente alabada. 
• Alimentar un rol, un personaje de uno mismo que no tiene nada que ver con el ser auténtico.
• No tener problemas de conciencia.
• Falta de asertividad.
• Interés en la otra persona de cualquier índole: social, económico, sexual ...
• El sacrificio que supone es muy pequeño frente al beneficio que provoca en la persona que es receptora de la "buena acción".

"Ser bueno" refuerza nuestra "marca" y nos permite vendernos mejor a los demás.

No soy nadie para criticar este tipo de conductas y quizá no hay que entrar en las razones de los buenos comportamientos.

El "agape" (término griego que significaba amar, servir a los demás) se refiere más a servir a los otros por la única recompensa que ver felices a las personas que nos rodean. Sacrificarse sin esperar nada más que la recompensa psicológica del altruismo puro.

Admiro a aquellas personas que son capaces de hacer grandes esfuerzos por personas desconocidas. Personas que no entienden de parentescos o de contratos sociales para subir o bajar su nivel de sacrificio. Personas que no esperan reconocimiento ni ninguna contraprestación. Personas que no están preocupadas de una imagen ni de lo que los demás opinarán de ellas. Personas simplemente auténticas.

BUSCANDO RESPUESTAS:

Leemos y escuchamos testimonios de personas que afirman dar respuesta a la pregunta "¿quién soy realmente?". Personas que toman consciencia al 100% de sí mismos y que no tienen reparos en decirnos de dónde vienen y a dónde van.

¿Es posible la iluminación o es un proceso de autosugestión?

Sé que la respuesta está dentro de nosotros pero cuál es la pregunta que nos tenemos que formular. Quizá no damos respuesta a nuestra existencia porque no hemos sabido formular la pregunta correcta...

Hoy barajo una serie de ideas inconexas que no sé a dónde me llevan y por esta razón me he puesto a escribir con la intención de sacar alguna conclusión o de recibir vuestra ayuda.

Las ideas son:

• La intuición y los sentimientos son procesos neuronales relacionados. Simplificando mucho, nuestra intuición depende de lo que sentimos.
• Nuestra intuición toma decisiones al margen de nuestra parte racional.
• Gran parte de las emociones son aprendidas, provienen de nuestra educación.
• Los sentimientos son la conceptualización de la percepción interna de nuestras emociones.
• Las emociones pueden ser gestionadas cognitivamente.
• El entorno condiciona nuestras emociones y la percepción del entorno depende de nuestra actitud.
• La actitud la podemos en parte decidir, la podemos construir a partir de los pensamientos. La otra parte viene condicionada por el contexto.
• Estimulaciones inconscientes del córtex cerebral reprocesan nuestros estados emocionales.
• Tenemos la capacidad de analizar nuestros comportamientos bajo el prisma de nuestra autoconciencia.
• La autoconciencia se alimenta de valores. Los valores son aprendidos.
• Valores y emociones determinan nuestra conducta. La razón y la intuición pueden modificarla.

¿Existe algo inmutable, "natural", "místico" en nuestro cerebro? ¿Existe algo que no esté condicionado ni por lo valores ni por el contexto, ni por las emociones que sea "auténtico"? ¿Es el alma? ¿Qué es entonces el alma?

Creo que para deshacer esta madeja se podría empezar resolviendo esta pregunta:

¿Existen valores "naturales", no aprendidos? ¿Existen pautas de comportamiento relativas a estos valores que están en consonancia con el orden y la programación del "Todo"?

Ahora entiendo porque el hombre se ha pedido siempre el comodín de la religión...

Se acabó la disertación, a fluir que son 3 días...